May 19, 2010

SARAH JURASSICA PARKER

This time in Spanish



De entre todo lo que marcó la primera década del siglo XXI, hay algo que me resulta insufrible: 'Sex in the city' y lo que Sarah Jessica Parker representa. Por motivos profesionales me ha tocado escribir una y otra vez sobre la serie y sus protagonistas, ese cuarteto de mujeres camufladas de progres neoyorquinas cuya única aspiración en la vida es encontrar un príncipe azul.

Nunca vi la serie hasta que llegó la última temporada y por curiosidad profesional me tragué unos cuantos capítulos: fue una ingrata sorpresa. Después de haber escuchado hablar maravillas relacionadas con la liberación de la mujer, me quedé atónita al descubrir lo carca y pureta que era este culebrón que tanto furor había desatado.

Luego llegó la siguiente pesadilla: la película. Por no hablar del daño estético con el que se agredió a una ciudad en la que las mujeres dejaron de ser originales para convertirse en clones con mechas de Sarah Jessica. Y los grupos de turistas haciendo el tour Sex in the city!! Socorro!!!!! (A Magnolia Bakery le ha ido muy bien. Yo me alegro, así los turistas no van a otras bakeries mucho mejores que no salen en la tele...)

Pues bien, ahora en Nueva York nos toca aguantar la segunda entrega en cines sobre estas cuatro petardas que ya sabemos que hablan mucho de sexo y se juntan para el 'brunch' y se gastan cifras absurdas en zapatos y ropa. Los carteles vuelven a estar en todas partes -no hay escapatoria!- pero aún así, este año me siento afortunada porque nadie me ha llamado para escribir sobre estas mujeres que representan todo lo que no quiero ser. A riesgo de tirar piedras sobre mi propio tejado en tiempos de crisis laboral -nunca se debería celebrar la pérdida de un trabajo seguro -y las entrevistas a sarah jessica lo eran- he decidido celebrar el no tener que volver a hablar con ella sobre su película (las películas SON suyas, las produce ella). Los periodistas deberíamos invertir nuestro tiempo en descubrir nuevos cineastas, o nuevas películas, o nuevas series, pero no dedicarle nuestra atención una y otra vez a los mismos personajes que nos ofrecen las mismas películas con diferente numeración.

Aquí dejo estos dos collages hechos por mi amigo Guillermo Escalona, cineasta indie afincado en Los Angeles (aquí un link a su último proyecto), al que supongo que tambien le horroriza Sarah Jessica y su interminable saga porque sin yo saberlo estaba enfrascado en hacer este par de genialidades inspiradas en el nuevo cartel de la película.

6 comments:

  1. Estoy de acuerdo. Es una versión insportable de esa cultura de los monólogos de la vagina. Petardez al cubo.

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  2. A mi seas cuatro me dan miedo. Transmiten una profunda insatisfacción que debe de ser lo que resuena en coleccionistas de manolos. Básicamente son un coñazo de tías neuroticas con las que no te puedes pegar unas risas.

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  3. Las aspiraciones de la vida AFORTUNADAMENTE no son para todos/as las mismas. Encuentro espeluznante que para considerarte una mujer de hoy tengas que soñar con .....? ahhhh sí cualquier cosa menos príncipes azules, zapatos caros y refrescádme la memoria, qué era lo otro ...? Se supone que la verdad está en las manos de mujeres preparadas, intelectuales, trabajadoras, que armonizan como pueden la vida familiar y la laboral, mujeres 10. Perdona, ojala pueda estar en mi casa, cocinar para alguien que me quiera, tener cuatro hijos y si me sale de los ovarios ponerme unos rulos. De mayor quiero ser maruja y a poder ser de las que compran en el groumette del corte inglés.
    Por cierto, mi nombre es yo elijo

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  4. Querida Bárbara y amigos, aunque los conozcáis, os recomiendo leer esto: http://kabemayor.blogspot.com/2010/09/contra-sexo-en-ny-y-otras-tontunas-rosa.html

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