Jan 6, 2009

REWIND: LEAVING LAS VEGAS



Ni yo soy Nicholas Cage ni la stripper a la que entrevisté en Las Vegas era Elisabeth Shue. Salvando las distancias, yo soy más guapa que Cage y además no soy alcoholica y Zoida, la stripper del Sapphire, el garito para Gentlemans "más grande del mundo" según se anunciaba en grandes carteles a la entrada, no era rubia y despampanante sino morenaza de ojos grandes, de aire middle east y piel tostada. Los prejuicios te llevan a entrar en semejante antro pensando que allí sólo habrá pobres desgraciadas que no tienen ni oficio ni condición y por eso les toca contonearse alrededor de una barra mientras un montón de hombres babosos babean. Pues no.

El tópico, por suerte, a veces se resquebraja ante la realidad. "En Las Vegas decir que trabajas en esto es bastante normal y no da verguenza". Zoida, madre soltera, contable de lunes a viernes y stripper los fines de semana, puede llegar a ganar hasta 600 dólares por hora. Y eso sin que le pongan la mano encima.

Pero ahora que hay crisis, yo quería saber si el negocio del sexo también sufre o si el vicio más antiguo del mundo es tan fuerte como para sobrevivir a la crisis. Oficialmente no hablé con prostitutas, Zoida no lo es, simplemente trabaja 'calentando' hombres al ritmo que marcan sus caderas. Pero supongo que puede ayudar a entender por donde van los tiros.

Por un 'lap dance' parece que no se gana mucho, 20 o 30 dólares más la propina que pueden ser otros 20 - tampoco está mal si se tiene en cuenta que el sueldo mínimo en el estado de Nevada es de 6.85 la hora- ."Pero si tienes suerte y te llevas a un cliente a la zona vip una hora son 600 dólares". Yo, ingenuamente, pensaba que en la zona vip sólo se hacía una cosa: follar. Pues no. En garitos como el Sapphire no hay sexo propiamente dicho. "Algunas chicas lo hacen pero a escondidas" decía Zoida. "Yo paso". No están obligadas, al contrario, las normas 'de la casa' lo prohiben. "Y en eso son muy estrictos".



Zoida se quejaba de que con la crisis ahora los clientes sólo te llevan a la sala vip "una media horita" que son 'sólo' 300 dólares. Ellas tienen que darle 100 dólares por cliente a 'la casa' y ellos tienen que gastarse otros 125 dólares mínimo en comprar champán... "Antes podía llegar a ganar unos 1800 por noche, ahora gano la mitad".

Ante estas cifras mareantes yo tuve que sentirme halagada: Zoida 'sólo' me cobró 30 dólares por darme audiencia periodística durante 15 minutos en medio del Sapphire en plena Nochebuena (sólo había chinos y árabes, la mayoría de los blancos, en casa con su esposa).
La experiencia fue extraña. Sin duda ser mujer y caminar vestida era una rareza en ese inmenso garito lleno de mujeres en carne viva. Los hombres que vi estaban igual de lobotomizados que los que se sientan durante horas frente a las máquinas tragaperras de los casino aunque en este caso al menos era otro ser vivo el que les encogía el coeficiente mental pero... no sé..

Creo sinceramente que no hace falta ir a Las Vegas. Es mucho más saludable alquilar Leaving Las Vegas, ver a Cage alcoholizarse, deprimirse con él y con Elisabeth Shue y apagar la tele. Al menos al acabar de ver la película uno podrá pasearse por algún lugar real. Las Vegas es algo bastante cercano a una ficción de neones, construcciones de tamaños desnaturalizados, horteradas a gogó, ofertas infinitas de diversión preconcebida y gente desesperada por pasarlo bien siguiendo un guión. La versión de Las Vegas que ofrece el cine o la fotografía es bastante más tolerable que la versión real.

7 comments:

  1. Pues yo sí creo que hay que ir. Las Vegas es delirante, tan delirante como dejar que unos tíos forrados de pasta y mal gusto construyan un parque temático para que se diviertan un montón de garrulos sin pasta pero con el mismo mal gusto. Es como ir de visita a lo más extremo del capitalismo. Y eso, aunque sea para horrorizarse, hay que verlo (y si uno se lo toma en plan cínico y se emborracha mucho, puede ser divertido, te lo aseguro).

    Feliz año, por cierto...

    Pedro

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  2. Entiendo lo que dices y eso es lo que a mí me llevó a ir a Las Vegas. Te juro que además intenté divertirme analizando hasta donde pueden llegar los límites del absurdo y en realidad hasta me reí a ratos porque efectivamente es un lugar delirante. Pero creo que tanto en este país como en este planeta hay lugares que te pueden llenar de sensaciones positivas, de buen rollo, de alegría, de sorpresas y Las Vegas en cambio te vampiriza, te agota y al final, aunque seas capaz de echarle mucho cinismo al asunto, sales de allí deseando no volver nunca. Yo entiendo tu punto de vista pero teniendo en cuenta lo corta que es la vida, yo simplemente me limito a decir que el tiempo es oro y creo que no hay que tirarlo en Las Vegas.
    Y sí, besotes de feliz año!!

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  3. No hay Ying sin Yang, ni tristeza sin alegrías, el blanco es más blanco porque hay negro y las miserias humanas dan una mejor perspectiva de lo positivo que hay en nosotros.

    Dante nos llevó al infierno y el viaje mereció la pena.

    Si, creo que hay que ir a Las Vegas.

    Gracias por tu blog. Nos hace pensar. ¡Y hace falta!

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  4. Lo cierto es que, aunque te diviertas, acabas agotado y, como dices, vampirizado. A los tres días estás hasta las pelotas y te quieres largar de ahí. El cañón es una alternativa brutal (aunque es otro parque temático).

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  5. Será porque fui al Cañon en pleno invierno y bajo tremenda nevada y sólo había cuatro turistas despistados pero no me pareció parque temático en absoluto. Aunque ya te digo que igual fueron las circunstancias y a lo mejor lo normal hubiera sido encontrarme hordas de japoneses y americanos...

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  6. Confieso un pecado enorme porque además puede sonar inexplicable...he ido 5 veces a las Vegas!!!... y volveré. Toda la mentira, el exceso de lo hortera, las luces falsas, el viaje de lujo para los pobres del lejano oeste, el ruído de las maquinas... hay que verlo! y yo se lo enseño a todo el que puedo...no hay que estar más de dos días pero ese tiempo se disfruta..No me digais que no es divertido mirar, que no hace pensar lo que uno ve, que no da un cierto gusto acomodarse en el lujo histérico de los hoteles, que una camarera de Missouri te acerque una copa mientras juegas unas monedas...

    ...y el cañon...es verdad que está todo muy organizado pero aquello no es un parque temático, es mucho más...el cañon además también es el camino hasta llegar, la carretera, los camiones la gasolinera...

    ...y si quedan ganas y días a tres horas más está la magia pura...monument valley. Puro Oeste del bueno!!

    Lo dicho, volveré. Y lo digo después de haber estado ahí hace unos días..

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  7. Carlos, eres una caja de sorpresas!!! Adicto a Las Vegas!!! Me encantas!

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